En lo que se refiere a frutas y verduras, orgánicas son aquellas que han sido cultivadas sin el uso de componentes químicos como fertilizantes y herbicidas. Cuando se habla de productos preparados orgánicos, el término se refiere a que éstos han sido preparados con materia prima orgánica y sin agregados artificiales.
La denominada carne orgánica es aquella que viene de animales alimentados con pastizales ecológicos (sin químicos) y bien tratados desde la gestación hasta la faena. Pareciera una obviedad el asumir que todas las vacas son vegetarianas, pero lo cierto es que muchas veces los animales son alimentados con proteínas animales y con hormonas para que se desarrollen más rápidamente.
En cambio, para producir carne orgánica los animales deben gozar de espacio, buen alimento y luz suficiente durante su cría. Los mismos no son tratados con hormonas y son trasladados en un ambiente cómodo solamente 400 kilómetros antes de su faena. Antes de enfrentar su final, además, descansan para evitar el stress, lo cual da como resultado una mejor calidad de carne.
Seguí leyendo para enterarte de por qué los productos orgánicos son mejores.
¿Por qué es mejor consumir productos orgánicos?
El uso de fertilizantes y pesticidas químicos presenta peligros para la vida vegetal, animal y humana durante su uso (estos productos son tóxicos y muchas veces cancerígenos).
Vegetal, porque los químicos alteran la composición natural de los suelos y pueden filtrarse hasta las napas subterráneas, contaminando la tierra y el agua. Animal, porque alteran los ecosistemas naturales de los campos. Y humana, porque el uso indiscriminado de estos productos altamente tóxicos en zonas cercanas a pueblos y barrios ha causado una enorme cantidad de casos de cáncer y otros problemas de salud. El barrio de Ituzaingó, en Córdoba, fue un caso testigo de la gravedad del uso de plaguicidas cerca de poblaciones: llegó a tener 60 casos de cáncer.
Por ejemplo, el uso indiscriminado de agrotóxicos cerca del barrio Ituzaingó Anexo de Córdoba ha dado como resultado más de 200 casos de cáncer en una población de no más de 5000 habitantes (Estudio del Grupo de Reflexión Rural, 2006 – PDF).
Como si fuera poco, muchas veces esos componentes químicos llegan hasta el plato de comida por medio de restos que quedan en los alimentos. De acuerdo a un estudio de la asociación estadounidense Consummers Union, el 77% de los alimentos cultivados de la forma tradicional presentan restos de pesticidas sintéticos.
En el mismo sentido, la carne producida en forma convencional muchas veces es tratada con hormonas que pueden desestabilizar el sistema hormonal humano. Además, la mayoría de los animales de criadero crecen en un ambiente altamente estresante que afecta la calidad de la carne.
