La resistencia a la insulina aumenta el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.
La persona con resistencia a la insulina tiene problemas para responder a
esta hormona, encargada del paso de los azúcares de la sangre a las
células, por lo que los niveles de glicemia suben sobre lo normal.
La resistencia a la insulina es una condición que aumenta el riesgo
de desarrollar diabetes tipo 2 así como enfermedades del corazón. La
persona que tiene resistencia a la insulina tiene problemas para
responder a esta hormona, la encargada de permitir el paso de los
azúcares que están en la sangre hacia las células, por lo que los
niveles de glicemia suben por sobre lo normal.
La insulina permite
que las células reciban el alimento que necesitan para producir
energía. Con todo el sistema funcionando bien, al ingerir alimentos
subirá la glicemia y se producirá una cantidad de insulina adecuada por
parte del páncreas para ajustarse a esa cantidad de alimentos.
Cuando se tiene resistencia a la insulina las células no responde a sus
órdenes, se hacen resistentes, entonces la insulina no puede hacer su
trabajo. Entonces el azúcar se comienza a acumular ahí, a la “entrada”
de la célula y el páncreas fabrica insulina extra para tratar de
normalizar el nivel de glicemia. Esto en algo ayuda, pero después de un
tiempo, incluso la insulina extra no logra ayudar y el nivel de glucosa
en sangre aumentará de todas formas, pudiendo llegar a estados de pre
diabetes o incluso derechamente diabetes.
Factores de riesgo para tener resistencia a la insulina
Hay más posibilidades de tener resistencia a la insulina con los siguientes factores:
- Sobrepeso.
- Vida sedentaria, no hacer actividad física.
- Padres o hermanos con diabetes tipo 2.
- Mujeres con síndrome de ovario poliquístico.
- Mayor de 45 años.
- Presión sanguínea mayor de 140/90 mm Hg
- Colesterol HDL (bueno) menor a 35 mg/dL
- Triglicéridos sobre 250 mg/dL
¿Cómo se diagnostica la resistencia a la insulina?
La
verdad es que no hay un examen específico que la diagnostique. Por lo
general no presenta síntomas, pero evaluando los factores de riesgo el
médico puede solicitar la glicemia en ayunas.